EL LUNES HA VENIDO Y NADIE SABE COMO HA SIDO…..

De nuevo el lunes se presenta ante nosotros sin ningún tipo de piedad y la rutina decide instalarse en nuestras vidas al menos durante otros 5 días, de nuevo el despertador empieza su trabajo desde muy temprano rompiendo el fino cristal de todos esos sueños que Morfeo ha instalado en nuestras cabecitas locas. Son días donde deambulas de un lado para otro con un cargamento de pereza a los hombros y un saco de recuerdos del fin de semana, días donde sientes el silencio de la noche aun cerrada cuando te levantas por la mañana, días de atascos y mala leche, días de nuevos propósitos, de nuevos miedos, días en los que nos queremos comer el mundo, entero, devorarlo e ir digiriéndolo poco a poco, a pesar de que son días en los que empiezas la dieta y “el mundo” no está entre tus platos permitidos, solo acelguitas y pescado hervido, nada de comernos el mundo, que engorda mucho, demasiadas calorías vacías en un lunes donde sientes que hay muchas cosas que cambiar en este mundo hipócrita, donde sientes que la espina de los lunes se ha clavado en tu piel. Al final decides comerte las acelguitas y el pescadito de tu dieta, ya nos comeremos el mundo otro día, un día que no sea lunes, y así vamos a trabajar pensando en el fin de semana, en nuestra camita y en la necesidad de abolir la esclavitud a la que nos tiene sometidos el despertador, el trabajo, la rutina, la vida….

Este fin de semana no he parado, unos fines de semana tanto y otros fines de semana tan poco, unos fines de semana donde el cansancio se acumula, fines de semana donde no descansas, y otros fines de semana donde la pereza y la vaguería mueven los hilos de tu existencia….en fin, así es la vida.
El viernes de fiestecilla en nuestro templo más sagrado, ese que es capaz de movilizarnos a todos, de abandonar nuestras preocupaciones y entregarnos a la diversión y a la cerveza en un ritual ya establecido, LA BODEGA DE AVENIDA DE AMÉRICA.
El sábado de cañitas por La Latina, de teatro, cenita, de risas y grandes momentos y el domingo de paseíto, más cañitas, exposición y Moyano, como no. En fin, gran fin de semana.

En este fin de semana me he dado cuenta que ya la edad no perdona, que el cansancio se va acumulando en nuestras venas al igual que lo hace el colesterol, poquito a poco hasta que acaba obstruyendo tu vitalidad. Pero aun después de este fin de semana, de lo que me he dado cuenta es que nada ni nadie, ni la edad siquiera, serán capaces de acabar con mis ganas de hacer cosas, de no parar en casa, solo o acompañado, las ganas de no envejecer nunca, o al menos dejar que solo envejezca el exterior, es inevitable, pero jamás el espíritu, porque en ese momento es cuando empiezas a morirte, de forma gradual, porque lo peor no es ser viejo, sino sentirte como un viejo.

En fin, después de tanta transcendencia vital, lo mejor que podemos hacer es dejar que pase el lunes, porque inevitablemente….aunque el lunes ha venido y nadie sabe como ha sido, otros muchos lunes pasarán por nuestras vidas.

Por eso, en este lunes, que mejor que empezar con música, con música de lunes, con música sobre un lunes de resaca, con música de Amaral, con música optimista y divertida, música con la que todos nos sentimos identificados al escuchar la letra, música con amor de por medio en un vagón de metro, gran música que consigue arrancar ese colesterol de falta de vitalidad de nuestras venas y elevarnos….

Volemos, volemos y “rompamos la barrera del sonido”…..

MADRID, I LOVE YOU!!!!!!!!!!!!!!!!!!