Isabel Coixet ha vuelto a mí, como vuelven las obsesiones y los miedos durante la noche. El jueves me reencontré con Isabel Coixet, el encuentro fue fortuito, sin aviso y con plena alevosía.
Todo transcurrió así…
Jueves Santo por la mañana, el sol dispara sus rayos cuando las nubes, también presentes, no se lo impiden. Día fresco en el que la chaqueta es nuestro más fiel amigo. Las 11:30 horas. El sol incide sobre mi piel. Dejo atrás El Retiro después de ojear, como es costumbre en los días festivos, el periódico El País y dar un breve paseo. El bullicio de la gente que no se ha ido de vacaciones y llena el parque retumba a mí alrededor. Tengo sed, tendré que esperar. Salgo por la Puerta del Ángel Caído y vuelvo a mirar al cielo. No parece que vaya a llover. Avanzo en dirección a la Cuesta de Moyano. Antes de llegar me detengo junto a la estatua de Pío Baroja y le doy los buenos días. Por fin vislumbro delante de mí una hilera de casetas repletas de libros olvidados, un cementerio de libros olvidados que diría Ruiz Zafón. Libros amarillos, repletos de polvo, con millones de historias sobre sus páginas. También hay libros nuevos, los menos. Decido avanzar y seguir el ritual de los domingos. Hay casetas que miro siempre y algunas que no miro nunca. Rebusco en la caseta 19, no encuentro nada. Compro tres libros en la caseta 15, tres euros. Una paloma decide cagarse encima de un pobre anciano. Sonrío, me contengo las carcajadas. Tras varios intentos fallidos, alcanzo la caseta 4, una de mis favoritas. Decido ojear el tablón repleto de libros, libros que encierran bajo llave un gran pasado. Tras mucho mirar, parece ser que no hay nada que me pueda interesar. Desanimo. Pesar. Esperanza. De repente, mis ojos miopes se cruzan con las letras del canto de un libro. Me ha parecido leer lo que he leído. Me aseguro. Efectivamente, hay un libro que me ha encontrado, un libro ansiado por mí durante mucho tiempo y que ya estaba agotado en la editorial. Lo cojo para asegurarme. Que nadie me lo quite, es mi tesoro. Libro de cine, libro de Isabel Coixet. Encuentro deseado que no esperado. Momento mágico. Descubro que allí está, que el libro me ha hablado para que yo lo encontrase…esa es la magia de La Cuesta de Moyano, que es el libro el que te elige a ti y no tú al libro. Es el libro el que te busca para que lo lleves a casa, le des cobijo en la estantería y te sumerjas en sus páginas, en ese olor característico a papel usado. Así, te das cuenta que la vida es un cúmulo de casualidades, la vida es una casualidad en sí misma. La vida es un guión.
LA VIDA ES UN GUIÓN de Isabel Coixet es el nombre del libro del que os hablaba. Isabel Coixet ha vuelto, como una obsesión. Isabel Coixet en estado puro, esa Isabel Coixet que me persigue desde el día mágico en el que descubrí sus películas: primero fue “mi vida sin mí”, magistral, luego fue “cosas que nunca te dije”, irrepetible, y más tarde “la vida secreta de las palabras”, tremendamente bella. Hay más películas pero esta son las que más me han marcado.
En este libro, LA VIDA ES UN GUIÓN, encontrareis el universo de Coixet: su infancia, sus manías y obsesiones, sus miedos, su compromiso contra la violencia de género, historias sobre el mejor cine y los secretos mejor guardados sobre su largometraje “mi vida sin mí”. No hace falta decir que os lo recomiendo, sobre todo a todos aquellos que habéis disfrutado con alguna de sus películas.
Todo transcurrió así…
Jueves Santo por la mañana, el sol dispara sus rayos cuando las nubes, también presentes, no se lo impiden. Día fresco en el que la chaqueta es nuestro más fiel amigo. Las 11:30 horas. El sol incide sobre mi piel. Dejo atrás El Retiro después de ojear, como es costumbre en los días festivos, el periódico El País y dar un breve paseo. El bullicio de la gente que no se ha ido de vacaciones y llena el parque retumba a mí alrededor. Tengo sed, tendré que esperar. Salgo por la Puerta del Ángel Caído y vuelvo a mirar al cielo. No parece que vaya a llover. Avanzo en dirección a la Cuesta de Moyano. Antes de llegar me detengo junto a la estatua de Pío Baroja y le doy los buenos días. Por fin vislumbro delante de mí una hilera de casetas repletas de libros olvidados, un cementerio de libros olvidados que diría Ruiz Zafón. Libros amarillos, repletos de polvo, con millones de historias sobre sus páginas. También hay libros nuevos, los menos. Decido avanzar y seguir el ritual de los domingos. Hay casetas que miro siempre y algunas que no miro nunca. Rebusco en la caseta 19, no encuentro nada. Compro tres libros en la caseta 15, tres euros. Una paloma decide cagarse encima de un pobre anciano. Sonrío, me contengo las carcajadas. Tras varios intentos fallidos, alcanzo la caseta 4, una de mis favoritas. Decido ojear el tablón repleto de libros, libros que encierran bajo llave un gran pasado. Tras mucho mirar, parece ser que no hay nada que me pueda interesar. Desanimo. Pesar. Esperanza. De repente, mis ojos miopes se cruzan con las letras del canto de un libro. Me ha parecido leer lo que he leído. Me aseguro. Efectivamente, hay un libro que me ha encontrado, un libro ansiado por mí durante mucho tiempo y que ya estaba agotado en la editorial. Lo cojo para asegurarme. Que nadie me lo quite, es mi tesoro. Libro de cine, libro de Isabel Coixet. Encuentro deseado que no esperado. Momento mágico. Descubro que allí está, que el libro me ha hablado para que yo lo encontrase…esa es la magia de La Cuesta de Moyano, que es el libro el que te elige a ti y no tú al libro. Es el libro el que te busca para que lo lleves a casa, le des cobijo en la estantería y te sumerjas en sus páginas, en ese olor característico a papel usado. Así, te das cuenta que la vida es un cúmulo de casualidades, la vida es una casualidad en sí misma. La vida es un guión.
LA VIDA ES UN GUIÓN de Isabel Coixet es el nombre del libro del que os hablaba. Isabel Coixet ha vuelto, como una obsesión. Isabel Coixet en estado puro, esa Isabel Coixet que me persigue desde el día mágico en el que descubrí sus películas: primero fue “mi vida sin mí”, magistral, luego fue “cosas que nunca te dije”, irrepetible, y más tarde “la vida secreta de las palabras”, tremendamente bella. Hay más películas pero esta son las que más me han marcado.
En este libro, LA VIDA ES UN GUIÓN, encontrareis el universo de Coixet: su infancia, sus manías y obsesiones, sus miedos, su compromiso contra la violencia de género, historias sobre el mejor cine y los secretos mejor guardados sobre su largometraje “mi vida sin mí”. No hace falta decir que os lo recomiendo, sobre todo a todos aquellos que habéis disfrutado con alguna de sus películas.
Es curioso pero todavía no se por qué me gustan tanto sus películas. Bueno sí, porque consiguen que no salga del cine indiferente, consiguen transportarme a la historia que estoy viendo y porque me hacen pensar durante días.
Me gusta esa manera de contar una historia, esa mezcla de noñería, tristeza, esperanza, amor… y esos personajes anodinos, rozando lo marginal.
No se si os gustará Isabel Coixet…pero ¿sabéis lo que más me gusta a mí de sus películas? La escena, tan habitual en sus películas, que transcurre en una lavandería, no se por qué pero me parece un sitio muy romántico, de echo, las escenas más románticas de las películas de Coixet transcurren en una lavandería. Me encanta esa escena.
El próximo proyecto de Isabel Coixet es la película “mapa de los sonidos de Tokio”…ya está rodada y no creo que tarde demasiado en estrenarse…tengo muchas ganas de verla, ¿A alguien le apetece acompañar a este friki???
Me gusta esa manera de contar una historia, esa mezcla de noñería, tristeza, esperanza, amor… y esos personajes anodinos, rozando lo marginal.
No se si os gustará Isabel Coixet…pero ¿sabéis lo que más me gusta a mí de sus películas? La escena, tan habitual en sus películas, que transcurre en una lavandería, no se por qué pero me parece un sitio muy romántico, de echo, las escenas más románticas de las películas de Coixet transcurren en una lavandería. Me encanta esa escena.
El próximo proyecto de Isabel Coixet es la película “mapa de los sonidos de Tokio”…ya está rodada y no creo que tarde demasiado en estrenarse…tengo muchas ganas de verla, ¿A alguien le apetece acompañar a este friki???
No hay comentarios:
Publicar un comentario